lunes, 30 de diciembre de 2013

El 33% de personas delgadas son obesa


Según un estudio de la Clínica Universidad de Navarra, un tercio de las personas delgadas son realmente obesas. Un 29% de las personas que en base al IMC están dentro del peso normal cuentan con un porcentaje de grasa corporal propio de un obeso
 
IMC delgados obesos
Investigadores demuestran que el IMC da errores en el diagnóstico de obesidad

El IMC no es infalible, ofrece una altísima tasa de error. Hasta ahora creíamos que el índice de masa corporal era el sistema científico más objetivo para determinar si una persona está delgada u obesa. Sin embargo, la realidad es que tres de cada diez personas clasificadas como delgadas son obesas. Es la conclusión que se extrae de un minucioso estudio llevado a cabo por la Clínica Universidad de Navarra, en el que el objetivo prioritario era evaluar el grado de error del IMC en el diagnóstico de la obesidad.

En la investigación participaron más de 6.000 individuos de edades comprendidas entre los 18 y los 80 años, de los cuales un 69% eran mujeres. Según los resultados obtenidos, un 29% de las personas que, de acuerdo al IMC se sitúan en el rango de normalidad, cuentan con un porcentaje de grasa corporal propio de una persona obesa. En otras palabras, en realidad presentan obesidad o un exceso de grasa en el cuerpo.

A modo de recordatorio, el IMC es el sistema de medición más extendido para conocer si existe sobrepeso u obesidad, y se calcula dividiendo el peso en kilogramos entre la altura en metros al cuadrado. De ahí la importancia que tiene comprobar el margen de error que comete el IMC al diagnosticar una enfermedad global, considerada epidemia, como la obesidad. Se puede decir que el índice empleado para valorar el estado nutricional de un individuo subestima las tasas de sobrepeso y obesidad.

Los investigadores detectaron que las personas de constitución delgada, según el IMC, pero clasificadas como obesas por su porcentaje de grasa corporal presentaban factores de riesgo cardiometabólico (hipertensión, glucosa, insulina, colesterol o triglicéridos) elevados.
El informe demuestra que, más que guiarnos por el peso, hay que tener en cuenta otros elementos de diagnóstico como el porcentaje de grasa corporal y los marcadores ya citados. No siempre una persona que a simple vista tiene el peso idóneo está tan saludable como parece y sin exceso de grasa corporal.